Hubo varios allanamientos por casos de explotación sexual o laboral en los últimos días en la provincia, y se advierte que las organizaciones delictivas están mutando sus métodos.
En una reciente entrevista con El Tribuno, la periodista rusa que se infiltró en diferentes redes de trata, Kitty Sanders, advirtió que “Salta es una zona roja al tener fronteras con Bolivia y Paraguay; varias chicas fueron trasladadas por allí y desaparecen, como así también desde esos países las trasladan por aquí hacia Buenos Aires”. Las formas de captación o retención de las víctimas mutó y ahora se recurre más al factor de presión económica.
La “metodología” de someter a la prostitución mediante la retención de documentos y amenazas fue sustituida por la coerción económica, porque es una manera más fácil de ganar dinero.
El policía explicó el modus operandi que se registra en las diferentes causas de trata. “En este caso (por el último allanamiento) había una persona que las dejaba en diferentes puntos de la ciudad y luego las recogía y les cobraba un porcentaje. En julio tuvimos otra causa en la que también se logró recuperar víctimas, tanto de la zona del bajo como del macrocentro. Los mismos captores hacen la publicidad y ellos cobran no solamente por eso, sino por el alquiler en diferentes puntos de la ciudad, por la seguridad y por buscarles los clientes”.
Las víctimas, que son en su mayoría mujeres o personas de la comunidad LGBTIQ+, son llevadas a la oficina de rescate a la víctima y asistidas por psicólogos, abogados y trabajadores sociales.
Fuente: El Tribuno Salta